En esta fase se realiza la implementación de los procesos para la evaluación del sistema; para medir el grado de implantación del sistema y su eficacia entre los procesos incluidos está auditoría interna, toma de acciones y revisión por la dirección.
Con el objetivo de determinar el grado de cumplimiento de la organización con respecto a un estándar, plan o modelo y dando conclusiones claras y breves.